Servicios públicos
La educación es obligatoria entre los 7 y los 12 años. Los fondos destinados a educación son muy escasos. Faltan libros, pupitres y otros materiales. En 2001, el gobierno anunció una estrategia de 10 años para desarrollar la educación básica dentro del Documento Estratégico para Reducir la Pobreza.
En 2005, la matriculación en enseñanza primaria fue del 40%. La matriculación femenina es del 33% de niñas y el 46% de los niños.
En 2005, las tasas de escolarización en las enseñanzas secundaria fue del 8%, y la tasa de matriculación en educación superior fue el 1%.
La vida de los niños discapacitados en Níger es muy difícil.
El acceso mejorado a fuentes de agua potable en 2004 en Níger es para el 46% de la población, y el acceso a servicios sanitarios es para el 13% de la población.
Economía y Trabajo
El 85% de la población activa de Níger se dedican a la agricultura subsistencia o al pastoreo. A pesar de la aridez generalizada del país, la agricultura proporciona la mayor parte de los ingresos nacionales. El sector se ha recobrado bastante de los efectos desastrosos de la sequía del Sahel que tuvo lugar durante la década de 1970, aunque durante la década siguiente se han producido otras sequías menores.
La ganadería es una actividad económica importante: vacas, ovejas, cabras, camellos, asnos y caballos.
El principal cultivo industrial es el del maní. Para el consumo local se produce mijo, sorgo, tapioca, judías y arroz.
Los principales minerales que se extraen en Níger son sal y natrón y estaño. En el norte del país se están explotando grandes depósitos de uranio.
La industria está dedicada sobre todo a la transformación de alimentos y a la construcción.
La pesca se practica en el lago Chad y en el río Níger para consumo local.
La edad mínima para trabajar es de 12 años, pero en las zonas rurales trabajan en explotaciones familiares desde muy pequeños.
Los trabajadores tienen derecho a asociarse, pero la mayor parte de la población se dedica a la agricultura de subsistencia, sector no sindicado.
El derecho a la huelga está permitido, salvo para las fuerzas de seguridad y la policía.
El trabajo forzado está prohibido, salvo en el caso de los presos, pero el trabajo forzado existe.