Servicio asesor para el CREA en materia de interculturalidad y
convivencia
Promueve, impulsa e implementa el CREA
Burkina Faso

Estructura de gobierno

Poder ejecutivo

Jefe de Estado: Roch Marc Christian Kaboré (desde 2015; reelegido en 2020)(Coalición: Alliance of Parties in the Presidential Majority -APMP). La coalición incluye el partido del presidente: People’s Movement for Progress (MPP) y New Era for Democracy (NTD).

Jefe de Gobierno (Primer Ministro): Christophe Joseph Marie Dabiré (desde 2019)

El presidente es elegido por sufragio universal y por mayoría absoluta, en 2 vueltas si es necesario, para un mandato de 5 años (elegible para una segunda). El primer ministro es nombrado por el presidente, con el consentimiento de la Asamblea Nacional

Las últimas elecciones presidenciales se celebraron el el 22 de noviembre de 2020 (la próxima se celebrará en noviembre de 2025). Estas elecciones se celebraron en medio de la violencia islamista y étnica que obligó a un millón de personas a huir de sus hogares y se cobró más de 2.000 vidas sólo en 2020. Según la Comisión Electoral Central, unos 166.000 votantes no pudieron inscribirse en los comicios de 2020 por miedo a la violencia en el norte y el este del país.

Poder legislativo

El Parlamento es unicameral. La Asamblea Nacional está formada por 127 escaños: 111 miembros son elegidos directamente, en 13 circunscripciones plurinominales, por voto de representación proporcional de la lista de partidos y 26 miembros son elegidos en una circunscripción nacional, por voto de representación proporcional. Todos los miembros ejercen un mandato de 5 años.

Las últimas elecciones legislativas se celebraron  el 22 de noviembre de 2020 (las próximas se celebrarán en noviembre de 2025).

Tras las elecciones legislativas de 2020, el porcentaje de mujeres en la Asamblea Nacional es del 6.3% (8/127).

Poder judicial

Tribunales superiores: Tribunal Supremo; Consejo de Estado; Consejo Constitucional  (formado por el presidente y 9 miembros)

Elección: los nombramientos de los jueces del Tribunal Supremo son controlados en su mayoría por el presidente de Burkina Faso; los jueces del Consejo Constitucional son nombrados por el presidente del país, a propuesta del ministro de justicia y el presidente de la Asamblea Nacional. Los jueces son nombrados por períodos de 9 años, con un tercio de los miembros renovados cada 3 años

Tribunales subordinados: Tribunal de Apelación; Tribunal Superior; Tribunales de Primera Instancia; Tribunales de Distrito; Tribunales Especializados en Materia Laboral, de la Infancia y de la Juventud; Tribunales de Aldea (consuetudinarios)

Sistema legal: Derecho civil basado en el modelo francés y en el derecho consuetudinario; a mediados de 2019, la Asamblea Nacional modificó el código penal

Balance geopolítico

Muchos de los grupos étnicos de Burkina Faso llegaron a la región entre los siglos XII y XV. Los pueblos gurma y mossi establecieron varios de los mayores reinos de la zona. De los distintos reinos mossi, los más poderosos eran los de Uagadugú y Yatenga. A finales del siglo XIX, los estados europeos compitieron por el control de la región. Francia acabó conquistando la zona y la estableció como protectorado francés.

La zona se independizó de Francia en 1960 con el nombre de Alto Volta y cambió su nombre por el de Burkina Faso en 1984.

Desde que Burkina Faso se convirtió en una nación independiente, los militares han intervenido en varias ocasiones en tiempos de crisis. En 1966, los militares, dirigidos por el teniente coronel (más tarde general) Sangoulé Lamizana, derrocaron al Gobierno elegido de Maurice Yaméogo. Lamizana dominó la política del país hasta noviembre de 1980, cuando una serie de huelgas lanzadas por trabajadores, profesores y funcionarios públicos provocó otro golpe, esta vez encabezado por el coronel Saye Zerbo.

El efímero gobierno de Zerbo terminó en noviembre de 1982, cuando los suboficiales del ejército se rebelaron e instalaron al mayor Jean-Baptiste Ouedraogo como presidente. El Gobierno de Ouedraogo pronto se dividió en facciones conservadoras y radicales, y los radicales tomaron el poder el 4 de agosto de 1983. Los radicales tomaron el poder el 4 de agosto de 1983 y crearon un Consejo Nacional Revolucionario (CNR), con el capitán Thomas Sankara como jefe de Estado.

Un año después de tomar el poder, Sankara rebautizó el país con el nombre de Burkina Faso, que significa «Tierra de gente incorruptible», y ordenó a todos los funcionarios, incluido él mismo, que abrieran sus cuentas bancarias al escrutinio público. Su Gobierno fue responsable de muchos logros, entre ellos: proyectos de vacunación y vivienda, plantación de árboles para contener el Sahel, promoción de los derechos de la mujer y freno a la corrupción y al despilfarro público. El Gobierno de Thomas Sankara incluyó un gran número de mujeres. Mejorar el estatus de las mujeres fue uno de los logros explícitos de Sankara, en el marco de una política por la igualdad de géneros sin precedentes en África Occidental. Su Gobierno suprimió la ablación de los genitales femeninos y condenó la poligamia. También fue el primer Gobierno africano en reconocer el SIDA como una gran amenaza para África.

Su programa revolucionario y marxista provocó una fuerte oposición de los líderes tradicionales de la pequeña, pero poderosa clase media, así como el recelo de Francia y muy especialmente  de la Françafrique, un turbio entramado de la exmetrópoli que defendía la perpetuación de su poder neocolonial en la antigua África francesa, mediante una nebulosa de actores (denominados «amigos de Francia») aglutinados en redes y lobbies en torno al aprovechamiento de las materias primas y la ayuda pública al desarrollo. Sankara devino un símbolo muy peligroso para los intereses espurios  de terceros durante sus cuatro años de Gobierno.

Durante el Gobierno de Thomas Sankara, las tensiones con Malí por la franja de Agacher, rica en minerales, estallaron en una breve guerra fronteriza en diciembre de 1985. La disputa se resolvió en el Tribunal Internacional de Justicia de La Haya un año después, para satisfacción de ambos países.

El 15 de octubre de 1987, Sankara fue asesinado durante el golpe de estado organizado por su sucesor, Blaise Compaoré (en abril de 2021, un tribunal militar de Burkina Faso ha imputado al expresidente Blaise Compaoré y a otras 13 personas por su supuesta implicación en el asesinato de Thomas Sankara).

Desde entonces, la evolución política del país vino marcada por la personalidad de Compaoré, que en 1991 estableció un sistema multipartidista y promulgó una Constitución democrática. Desde 1991, Blaise Compaoré fue reelegido ininterrumpidamente en todas las elecciones presidenciales. En octubre de 2014, el intento del presidente Compaoré de modificar la Constitución y poder así volver a presentarse a las elecciones desencadenó fuertes protestas populares que acabaron provocando su dimisión.

El coronel Isaac Yacouba Zida, antiguo jefe adjunto de la Guardia Republicana, asumió el poder transitoriamente, y tras 18 días de Gobierno entregó el poder a Michel Kafando, quien ejerció de presidente Interino durante la transición.

Tras un intento frustrado de golpe de Estado contra el Gobierno interino, el 29 de noviembre de 2015 se realizaron elecciones generales, en las que resultó ganador Roch Marc Christian Kaboré (del Movimiento del Pueblo para el Progreso-MPP), con el 53,5 % de los votos. Finalmente, juró como presidente el 29 de diciembre de 2015, convirtiéndose en el primer mandatario electo democráticamente de Burkina Faso y en el primer civil en asumir el cargo desde el Gobierno de Maurice Yaméogo.

El 22 de noviembre de 2020, Roch Marc Christian Kaboré fue reelegido presidente del país en las elecciones presidenciales. Estas elecciones fueron las primeras en las que pudieron participar los burkineses en el exterior. Los resultados de las legislativas también dan la victoria al MPP con 56 escaños, pero sin obtener la mayoría absoluta.

La situación actual de Burkina Faso está marcada por la creciente violencia terrorista yihadista (Ansaroul Islam, Grupo de Apoyo al Islam y a los Musulmanes-GSIM) e intercomunitaria. La porosidad de las fronteras y la débil presencia de las fuerzas de defensa y seguridad en las regiones limítrofes con Malí y Níger han facilitado la extensión del terrorismo a Burkina Faso, especialmente desde 2018.

Los grupos terroristas -incluidos los grupos afiliados a Al Qaeda y al Estado Islámico- comenzaron a atentar en el país en 2016 y llevaron a cabo ataques en la capital en 2016, 2017 y 2018. A finales de 2020, los ataques terroristas habían provocado aproximadamente 4.000 muertes y más de un millón de desplazados internos. Hay miles de escuelas cerradas por amenaza terrorista.

Además del terrorismo, el país se enfrenta a otros problemas, como el elevado crecimiento de la población, la sequía recurrente, la inseguridad alimentaria generalizada en el país y la limitación de los recursos naturales. Es uno de los países más pobres del mundo.

Relaciones internacionales

El país con el que Burkina Faso tiene unos vínculos culturales, étnicos y comerciales más fuertes es Costa de Marfil, donde viven 3 millones de burkineses. Las relaciones entre ambos países han tenido altibajos históricos (acuerdo político de Uagadugú, 2007), pero desde la posición favorable al presidente marfileño Ouattara en la grave crisis postelectoral en Costa de Marfil (tras la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de noviembre de 2010), las relaciones se han fortalecido.  

Las relaciones de Burkina Faso con Ghana han sido también tradicionalmente buenas (en los años 80, Rawlings y Sankara llegaron a plantear una unificación).

El expresidente Compaoré fue activo en la política subregional en África del Oeste: presidió la Comunidad Económica de Estados de África del Oeste (CEDEAO) y actuó como mediador en crisis políticas en Togo, Costa de Marfil, Guinea y Mali. En Uagadugú se encuentra la sede de la Unión Económica y Monetaria de África del Oeste (UEMOA).

Francia y la UE son socios preferentes de Burkina Faso, país que mantiene también estrechas relaciones bilaterales con Alemania, Dinamarca, Países Bajos, Suecia, Suiza y Canadá.

En 2018, inició relaciones diplomáticas con China, que, desde entonces, ha realizado importantes inversiones en Burkina Faso, especialmente en los sectores de las infraestructuras, agricultura y sanidad.

Las relaciones con EEUU se tensaron por la supuesta implicación de Burkina en los conflictos de Liberia y Sierra Leona y sus estrechas relaciones con Libia. Durante los últimos años, las relaciones de EEUU con los países de la región, incluido Burkina Faso, se han venido intensificando en el marco de la lucha contra el grupo terrorista Al-Qaida en el Magreb Islámico (AQMI) y recientemente contra el DAESH, que han ido extendiendo su actividad desde el norte del país junto con milicias locales.

Las relaciones con los países árabes del Golfo se han intensificado también en los últimos años, especialmente con Emiratos Árabes Unidos.

Las relaciones bilaterales entre España y Burkina Faso son buenas pero muy limitadas. Tras el cierre de la Oficina de Abidjan en 2005, Burkina Faso se incluyó entre los países de la demarcación de la Oficina Económica y Comercial de España en Dakar, si bien volvió a la de Abidjan tras la reapertura de ésta en 2014. Hay un viceconsulado honorario de España en Uagadugú. Los intercambios comerciales entre España y Burkina Faso son reducidos. En 2019, Burkina Faso ocupó el penúltimo puesto como proveedor de España en la región, y el último puesto como destino de las exportaciones españolas a la zona, tras haber sido superado por Cabo Verde (fuentes: ICEX y Ministerio de Asuntos Exteriores de España; Britannica).

Sociedad

DIVISIÓN ADMINISTRATIVA: Burkina Faso se divide en regiones(13);  éstas, en provincias (45) y éstas, a su vez en departamentos (301). Cada región está administrada por un gobernador, y cada provincia por un alto comisario.  Las regiones y su respectiva capital son: BOUCLE DU MOUHOUN (Dédugu); CASCADES (Banfora); CENTRO (Uagadugú), CENTRO-ESTE (Tenkodogo); CENTRO-NORTE (Kaya); CENTRO-OESTE (Kudugu); CENTRO-SUR (Manga); ESTE (Fada N’gourma); HAUTS-BASSINS (Bobo Dioulasso); NORTE (Ouahigouya); PLATEAU-CENTRAL (Ziniaré); SAHEL (Dori); SUROESTE (Gaoua).

GRUPOS ÉTNICOS Y LENGUAS: el principal grupo etnolingüístico de Burkina Faso son los mossi. Hablan una lengua Níger-Congo (de la rama Gur) y están vinculados, desde hace siglos, a la región que habitan. Han absorbido a varios pueblos, como los gurma y los yarse. Este último grupo es de origen mande, pero está asimilado a los mossi y comparte su lengua (llamada moore). Las lenguas mande, que también forman una rama de la familia Níger-Congo, son habladas por  diferentes grupos. Otros grupos de Burkina Faso son los hausa y los tuareg, cuyas lenguas se clasifican como afroasiáticas, y los fulani, cuya lengua (el fula) es una lengua Níger-Congo de la rama atlántica.

Los ciudadanos de Burkina Faso, independientemente de su origen étnico, son conocidos colectivamente como burkineses. El francés es la lengua oficial, aunque no se habla mucho. El mooré, la lengua de los mossi, es hablado por una gran mayoría de la población, y el dyula se utiliza ampliamente en el comercio (fuente: Britannica)

RELIGIÓN: más de la mitad de la población es musulmana. Aproximadamente una quinta parte de los burkineses son católicos romanos, y una sexta parte sigue las religiones tradicionales. El resto de la población es protestante o no religiosa. El Estado es laico.

PENA DE MUERTE: es abolicionista desde el 31 de mayo de 2018, cuando la Asamblea Nacional aprobó un nuevo Código Penal aboliendo la pena de muerte para todos los delitos comunes. La última ejecución data de1988. El país forma parte del del Segundo Protocolo Facultativo del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (PIDCP), destinado a abolir la pena de muerte

DERECHOS LGBTI: la homosexualidad es legal en Burkina Faso.  El Código penal vigente (1996) lo ratifica. El matrimonio en Burkina Faso se define como «entre un hombre y una mujer», por lo que no reconoce el matrimonio entre personas del mismo sexo. El artículo 23 de la Constitución del país, de 1991, establece: «El matrimonio se basa en el libre consentimiento del hombre y de la mujer. Toda discriminación basada en la raza, el color, la religión, la etnia, la casta, el origen social o la fortuna está prohibida en materia de matrimonio». La discriminación es ilegal (en determinados contextos), según el artículo 23 de su Constitución, si bien no hay un desarrollo normativo específico para la protección del colectivo LGBTI.

© Nazioarteko Elkartasuna • Solidaridad Internacional | Conde Mirasol 7 bajo • 48003 Bilbao | Tel. 944 792 258 || Aviso Legal | Mapa Web | Fuentes Documentales

Creative Commons License