Poder ejecutivo

Jefe de Estado: presidente Macky SALL (desde 2012)
Jefe de Gobierno: Primer ministro Macky SALL

El cargo de primer ministro fue suprimido en mayo de 2019. El presidente es elegido por sufragio universal y por mayoría absoluta, en 2 vueltas si es necesario, para un único mandato renovable de 5 años.

La última elección se celebró el 24 de febrero de 2019 (la próxima se celebrará en febrero de 2024)

Mame Madior Boye se convirtió, en 2001, en la primera mujer primer ministro de Senegal, en 2001; ha habido mujeres ministras en la historia política senegalesa.

Poder legislativo

El Parlamento senegalés es unicameral. La Asamblea Nacional (Assemblée Nationale) consta de 165 escaños; 105 miembros -incluidos 15 en representación de la diáspora senegalesa- son elegidos por sufragio universal y mayoría de votos, en circunscripciones uninominales y plurinominales: los otros 60 miembros son elegidos por voto de representación proporcional en circunscripciones uninominales y plurinominales).

De acuerdo con las enmiendas constitucionales adoptadas en marzo de 2016, el número estatutario de miembros de la Asamblea Nacional aumentó de 150 a 165, para incluir 15 escaños para la diáspora senegalesa.

En las últimas elecciones celebradas el 2 de julio de 2017 (la próxima se celebrará en julio de 2022), la coalición del presidente Macky Salls, Benno Bokk Yaakaar, obtuvo una mayoría de dos tercios en la Asamblea Nacional de 165 miembros. La coalición  del ex presidente Abdoulaye Wade, «Wattu Senegaal», quedó en segundo lugar, con 19 escaños. La coalición «Mankoo Taxawu Senegaal», dirigida por el alcalde de Dakar, Khalifa Sall, obtuvo siete escaños. Otros 11 partidos obtuvieron menos de tres escaños cada uno.

Tras las elecciones de 2017, el porcentaje de mujeres en la Asamblea Nacional es del 41,82% (69/165).

Poder judicial

El poder judicial en Senegal lo ejercen el Consejo Constitucional, el Consejo de Estado, el Tribunal de Casación, el Tribunal de Cuentas y los Juzgados y Tribunales. Senegal cuenta también con un Alto Tribunal de Justicia, cuyos miembros son elegidos por la Asamblea Nacional. El Alto Tribunal juzga a los funcionarios del Gobierno por delitos cometidos en el ejercicio de sus funciones.

Sistema legal: sistema de derecho civil basado en el derecho francés; revisión judicial de los actos legislativos en el Tribunal Constitucional

Los senegaleses fueron pioneros en el desarrollo de un sistema político moderno en los territorios del África Occidental francesa. Al principio, la vida política sólo concernía a una élite formada por intelectuales, jefes tradicionales y los habitantes de los cuatro municipios -Saint-Louis, Dakar, Rufisque y Gorée- que eran ciudadanos franceses desde 1916. Después de la Segunda Guerra Mundial se introdujo el sufragio universal por etapas, y el electorado pasó de 890.000 votantes en 1958 a 3.164.827 en 1998. En la actualidad, los ciudadanos senegaleses participan en las elecciones del presidente, los miembros de la Asamblea Nacional y los consejeros regionales y municipales.

A diferencia de la mayoría de los Estados africanos, que tienden a pivotar sobre un único partido político, Senegal cuenta con un sistema multipartidista sólidamente arraigado y garantizado por una disposición constitucional. A las elecciones concurren varios partidos que representan un amplio abanico de opiniones políticas. Aun con esta diversidad, la política de partidos desde la independencia nacional estuvo dominada durante mucho tiempo por el Partido Socialista (hasta 1976, la Unión Progresista Senegalesa). Hasta el siglo XXI no se impuso otro partido.

Además de las actividades de los partidos políticos y los sindicatos, hay otras instituciones que permiten participar en el proceso político. Entre ellas se encuentran las «asociaciones de ayuda mutua», que se organizan tanto a nivel regional como de pueblo, las asociaciones juveniles y las agrupaciones religiosas, que son las más influyentes.

Senegal es uno de los pocos países del mundo con evidencias de vida humana continua desde el Paleolítico hasta el presente. Entre los siglos XIV y XVI, el Imperio Jolof gobernó la mayor parte de Senegal. A partir del siglo XV, Portugal, los Países Bajos, Francia y Gran Bretaña comerciaron a lo largo de la costa senegalesa. La ubicación de Senegal en el extremo occidental de África lo convirtió en una base favorable para el comercio europeo de esclavos. Las potencias europeas utilizaban la isla senegalesa de Goree como base para comprar esclavos a los jefes de guerra del continente, y en el momento álgido del comercio de esclavos en Senegal, más de un tercio de la población senegalesa estaba esclavizada. En 1815, Francia abolió la esclavitud y comenzó a expandirse hacia el interior. Durante la segunda mitad del siglo XIX, Francia tomó posesión de Senegal como colonia francesa. En 1959, las colonias francesas de Senegal y Sudán francés se fusionaron y se les concedió la independencia en 1960 como Federación de Malí. La unión se rompió a los pocos meses. En 1982, Senegal se unió a Gambia para formar la confederación nominal de Senegambia. La integración prevista de los dos países nunca se llevó a cabo, y la unión se disolvió en 1989.

Senegal es una República presidencialista, cuya Primera Magistratura se elige por sufragio universal directo y secreto. El actual presidente es Macky Sall (PR Sall). Elegido por vez primera para el periodo 2012-2019, renovó su mandato en primera vuelta en las presidenciales de febrero de 2019, con el 58% de los sufragios, y una participación del 66,26% del censo electoral.

Tras el referéndum de reforma de la Constitución de marzo de 2016, la presidencia se limitó a 5 años, renovable con carácter consecutivo solo una vez.

El Partido Socialista (PS), primero con Leopold Sedar Senghor y luego con Abdou Diouf, fue el partido hegemónico desde la independencia en 1960 hasta el 2000. La victoria en las presidenciales de Abdoulaye Wade, del Partido Democrático Senegalés (PDS), inició el periodo denominado “la alternancia”, nombre de la coalición que apoyó a Wade (Alternance 2000). Reforzado con una mayoría absoluta en las legislativas de 2001, el presidente Wade impulso una reforma constitucional para reforzar el carácter presidencialista del sistema político y fue reelegido en las presidenciales de 2007.

Las elecciones de 2012 confirmaron la normalidad del juego democrático en el país, con la elección del opositor Macky Sall, en 2ª vuelta, con el 65,8% de los votos. Para su elección, contó con el apoyo de todos (12) los candidatos que no pasaron la primera vuelta, mediante la creación de una nueva coalición: Bennoo Bokk Yakaar (o Rassemblement des forces du changement), encabezada por su partido la “Alianza por la República”.

Esta nueva alternancia tuvo lugar tras meses de tensión, a lo largo de los cuales se produjo una importante movilización de la sociedad civil (principalmente del Movimiento M23) y de la oposición, para impedir un tercer mandato del presidente Wade, cuya imagen se había visto notablemente erosionada durante los últimos años de su segunda presidencia.

Durante su primer mandato (2012-2019), la acción política del Gobierno Sall se caracterizó por el impulso renovado a la descentralización administrativa y la lucha contra malas praxis políticas, marcada por los procesos seguidos contra el hijo del ex presidente Wade, Karim Wade, por corrupción, y contra el entonces alcalde de Dakar, Khalifa Sall, por uso indebido de fondos públicos.

Desde noviembre de 2012, la política económica de Senegal está inspirada por la Estrategia Nacional de Desarrollo Económico y Social, cuyo objetivo es la reducción sustancial de la pobreza en 2020, y la puesta en marcha del “Plan Senegal Emergente” (PSE) en 2014, con una fuerte inversión en infraestructuras y ha emprendido una ambiciosa agenda social, con el fin de que el país alcance en 2035 la condición de “emergente”.

En las elecciones legislativas posteriores a la elección del PR Sall (01.07.2012), su coalición (Bennoo Bokk Yakkaar-BBY) obtuvo una contundente victoria (119 escaños). Las elecciones al Senado nunca tuvieron lugar, al aprobarse una reforma constitucional para suprimir la Cámara alta y transformar el Consejo Económico y Social en un Consejo Económico, Social y Medioambiental.

En las elecciones locales de 29.06.2014, la coalición BBY sufrió una importante derrota en algunas de las principales ciudades del país, muy especialmente en Dakar. Su alcalde, el socialista Khalifa Sall, renovó su mandato con una contundente victoria, que más tarde resultó ensombrecida por su comparecencia ante la División de Investigaciones Criminales y posterior ingreso en prisión preventiva (el 07.03.2017); fue condenado a cinco años de prisión, por el uso irregular de los fondos de libre disposición de la Alcaldía.

Estos hechos provocaron la aparición de una nueva coalición “Manko Takhawou Senegal” (MTS) encabezada por Khalifa Sall, quien fue expulsado del Partido Socialista en diciembre de 2017, ya que la línea oficial del partido estaba integrada en la coalición BBY.

El alcalde de Dakar, que se perfilaba como el principal oponente al PR Sall en las presidenciales, vio frustrada su candidatura tras su condena definitiva (el 3 de enero de 2019), que le inhabilitó para ejercer el sufragio activo y pasivo.

En las elecciones legislativas de 30.07.2017, BBY renovó su mayoría absoluta con 127 escaños; la “Coalition Gagnante/Wattu Senegal” (WS) del expresidente Wade, obtuvo 19 escaños; la coalición de Khalifa Sall, (MTS) 7 escaños; el partido islamista PUR (moustachirdines) 3; “Convergence Patriotique” 2, y 1 escaño consiguieron otros 7 partidos minoritarios.

En todo caso, el sistema electoral senegalés combina un sistema de distritos electorales mayoritarios, y una adjudicación de escaños proporcional primando a las mayorías: con el 49,4 % de los sufragios, la coalición BBY obtuvo casi el 75% de los escaños de la cámara.

A consecuencia de las tensiones y desencuentros entre Gobierno y oposición ante las presidenciales de 2019, tras su reelección, el PR Sall ha lanzado dos procesos de “diálogo” con participación de Gobierno, oposición, sociedad civil y sector privado: el “nacional”, para “alcanzar consensos que reflejen los intereses de Senegal” en tres áreas: “económicas y sociales, medioambientales, y paz y seguridad”, y el “político”, relativo a asuntos como la normativa electoral e institucionalización de la relación Gobierno-oposición.

La oposición criticó duramente la aprobación, meses antes de las presidenciales, de la denominada “Ley de avales” (recientemente el Tribunal CEDEAO ha estimado que no es conforme a la carta de dicha organización y ha dado seis meses a las autoridades de Senegal para que la eliminen de su legislación electoral) que establece el necesario respaldo entre el 0’8 y 1% del electorado para cualquier candidatura, así como el censo de electores que consideraba incompleto. Gobierno y oposición, en el marco del diálogo político, acordaron aplazar las elecciones locales (previstas para junio de 2019), con la fecha límite de 28.03.2021, con el fin de poder resolver ambas quejas de la oposición. Finalmente, las elecciones locales han sido fijadas el 23 de enero de 2022.

Con respecto a las personalidades opositoras, en septiembre de 2019, el PR Sall ejerció su derecho de gracia con Khalifa sall, como ya lo había hecho en 2016 con Karim Wade, aunque en ambos casos se mantienen las penas accesorias (privación de derechos civiles y multas). La reciente modificación del código electoral se ha llevado a cabo con la vista puesta en las elecciones locales de enero de 2022.

En las legislativas de 2017, y presidenciales de 2019, ha irrumpido en la vida política senegalesa Ousmane Sonko, opositor frontal al PR Sall quien procura aumentar su apoyo entre las emergentes clases medias y jóvenes urbanos que exigen a la clase política mayor ética y más transparencia en el uso de recursos públicos.

El PR Sall, tras tomar posesión de su 2º mandato, el 10.04.2019 dio a conocer la composición de su nuevo Gobierno que fue nuevamente reajustado en noviembre de 2020. En marzo de 2021, tras la retirada de la inmunidad parlamentaria a Ousmane Sonko, líder del partido opositor PASTEF-Les Patriotes, tuvieron lugar disturbios sociales en Dakar y otras localidades del país que, principalmente, fueron la respuesta al deseo de amplias capas sociales de unas mayores perspectivas de futuro

Relaciones internacionales

Senegal ha apostado por la integración económica regional de África del Oeste en el marco de la CEDEAO y por la profundización en las relaciones regionales a través de una política de buena vecindad y su implicación en las crisis de Mali, Guinea Bissau y Gambia. Senegal es miembro fundador de la CEDEAO (Comunidad Económica de los Estados de África Occidental) y de la UEMOA (unión aduanera y monetaria entre algunos de los miembros de la CEDEAO, que busca la integración entre los Estados que comparten el Franco CFA como moneda común). Senegal ocupará la presidencia de la Unión Africana en 2022.

Las relaciones de Senegal con Gambia han mejorado, y ha habido un acercamiento a Mauritania, en gran medida por la necesidad común de explotar los yacimientos de gas situados en aguas de ambos estados. Senegal también se ha implicado activamente en el problema de la seguridad regional, especialmente en las crisis de Mali, Guinea Bissau, Burkina Faso y Gambia.

Desde su independencia como República, Senegal ha mantenido una estrecha relación con Francia. También con EEUU mantiene relaciones estrechas. En los últimos años han adquirido mayor peso sus relaciones exteriores con Sudáfrica, India, Brasil, China, los Emiratos del Golfo, Corea del Sur o Turquía.

Con la UE mantiene una relación privilegiada , que se enmarca en el Acuerdo de Partenariado ACP-UE, firmado en Cotonou en junio de 2000, que incluye las relaciones en el ámbito de la Cooperación al Desarrollo. 

Las relaciones diplomáticas con España se establecieron en 1960, inmediatamente después de la independencia. La Embajada de España en Dakar se creó en 1961. La Embajada residente de Senegal en España (desde 1965) cerró entre 1991 y 2001 por razones presupuestarias, período durante el cual las gestiones se realizaron desde su Embajada en París; se reabrió en Madrid en 2002. El punto de inflexión en las relaciones bilaterales se produjo a partir del verano de 2006, con motivo de la llamada “crisis de los cayucos” (llegada de aproximadamente 30.000 inmigrantes senegaleses a costas de las Islas Canarias). A partir de entonces, las relaciones comenzaron a basarse en la búsqueda de una estrategia común en la lucha contra la inmigración irregular, hasta convertirse en una relación multiforme que supera ampliamente el ámbito de las migraciones. En diciembre de 2006 se produjo la primera visita de un Presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, a la República de Senegal.

La balanza comercial con Senegal ha registrado tradicionalmente un superávit a favor de España. En 2020, desde la perspectiva de Senegal, España ocupó el 8º puesto en el ranking de países clientes, tras Mali, Suiza e India, China, Australia, Costa de Marfil y Guinea. En el ranking de países proveedores, España ocupó el 6º puesto tras Francia, China, Países Bajos, Bélgica, Nigeria y Rusia. Las importaciones senegalesas de España se centran el sector pesquero, y las exportaciones a Senegal, en productos industriales y tecnologías. La Agencia Española  de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) cuenta con una Oficina Técnica de Cooperación en Dakar (OTC) desde 2004.  El Instituto Cervantes de Dakar, primero situado en África Subsahariana, nació de un convenio suscrito con la Universidad Cheikh Anta Diop, con el fin de promover el estudio de la lengua española y fomentar el mutuo conocimiento entre las culturas hispánicas y las culturas locales y del África Occidental (fuente: Ministerio de Asuntos Exteriores de España)

DIVISIÓN ADMNISTRATIVA: Senegal está dividido en 14 regiones, que a su vez se dividen en departamentos y distritos. Cada región está administrada por un gobernador, cuya función es de coordinación y está asistido por dos vicegobernadores, uno de ellos encargado de la administración y el otro del desarrollo. Las Asambleas regionales, cuyos poderes se incrementaron en 1996, están compuestas por consejeros generales responsables de la fiscalidad local. En cada departamento, el prefecto representa a la República, al igual que los ministros. También hay municipios urbanos autónomos. Dakar está gobernada por un electo consejo municipal

GRUPOS ÉTNICOS: los wolof representan aproximadamente dos quintas partes de la población total, y su lengua es la más utilizada en la República. En la estructura social tradicional de los wolof, similar a la de otros grupos de la región, la población se dividía en las categorías de «libre» (incluidos nobles, clérigos y campesinos), «casta» (incluidos artesanos, griots y herreros) y «esclavos». Los serer, que representan algo más de una séptima parte de la población, están estrechamente relacionados con los wolof. Los Tukulor representan más de una cuarta parte de la población. A menudo es difícil distinguir a los tukulor de los wolof y los fulani, ya que a menudo se han casado con ambos. Los diola y los malinke constituyen una pequeña parte de la población. Otros grupos pequeños son los Soninke, gobernantes del antiguo estado de Ghana; los Mauri, que viven principalmente en el norte del país; los Lebu de Cabo Verde, que son pescadores y a menudo ricos terratenientes; y los Basari, un antiguo pueblo que se encuentra en las tierras altas rocosas de Fouta Djallon.

LENGUAS: se hablan unas 39 lenguas, entre ellas, el francés (lengua oficial) y el árabe. Los lingüistas dividen las lenguas africanas que se hablan en Senegal en dos familias: la atlántica y la mande. La familia atlántica (generalmente en la mitad occidental del país) contiene las lenguas más habladas: wolof, serer, fula y diola. Las lenguas mande (en la mitad oriental) incluyen el bambara, el malinke y el soninke (fuente: Britannica)

RELIGIÓN: Senegal es un Estado laico (Art. 1 de la Constitución), en el que coexisten de forma pacífica diferentes creencias y religiones. El Islam es la religión de la gran mayoría de la población, que se practica a través de la participación en grupos conocidos como hermandades musulmanas. En Senegal, las tres hermandades principales son la Qadiri (Qadiriyyah), la Tijani (Tijāniyyah) y la Mourides (Murid, Murīdiyyah). Los líderes espirituales conocidos, como marabouts, ocupan un lugar destacado en las hermandades musulmanas y son importantes para mantener el statu quo social. Touba, la ciudad más sagrada de Senegal, es el lugar de nacimiento de Amadou Bamba M’backe, el fundador de la cofradía de los Mourides. Un pequeño segmento de la población sigue las religiones tradicionales (los diola tienen una clase sacerdotal que dirige la veneración de los antepasados). El cristianismo es practicado por una población creciente, pero muy reducida (no llega al 5%). El cristianismo llegó a la región a partir de 1486, y el contacto se renovó con la llegada en 1819 de monjas de la orden de San José de Cluny. La mayoría de los seguidores son católicos romanos, y el pequeño número de protestantes son, en su mayoría, inmigrantes de Europa.

Los musulmanes, especialmente los suníes, son conscientes de su poder político y han llegado a pedir la creación de un Estado islámico. El Gobierno sigue comprometido con un estado laico (fuentes: Britannica y Ministerio de Asuntos Exteriores de España).

PENA DE MUERTE:  abolida en 2004. En 2016, el presidente, Macky Sall, rechazó una propuesta para restaurar la pena de muerte en el país.

DERECHOS LGBTI:  la homosexualidad no está admitida, estando además penada severamente con penas de cárcel y multa. El artículo 319 del Código Penal senegalés prevé penas de cárcel de entre 1 y 5 años y multas de hasta de 1,5 millones de francos CFA para las personas que mantengan «actos impúdicos o contra natura con un individuo del mismo sexo”. En la sociedad senegalesa prevalece una moralidad muy conservadora que rechaza los comportamientos no heterosexuales. Un simple acercamiento o un intento de relación homosexual puede llevar a una pena de prisión