Los grupos humanos en el norte del país fueron atraídos por las redes comerciales transaharianas de los imperios de Ghana y Malí. El Islam llegó con los mercaderes malinke a medida que se expandía el comercio. El colapso de Malí, en el siglo XVI,  provocó una gran agitación que envió oleadas de emigrantes hacia el sur, donde fundaron nuevos reinos en el interior de la zona forestal. Los habitantes originales fueron desplazados o asimilados por estos nuevos grupos, que crearon importantes reinos, como el de Kong, Bouna, Abron de Gyaman, Anyi o Baule (éste último fundado por la reina Abla Poku, quien, tras la muerte en 1750 del gobernante de los Asante, el Asantehene Opoku Ware, perdió en la  lucha por la sucesión en Kumasi , la capital del imperio Asante; viéndose obligada  a huir con sus partidarios, se adentró en el centro-norte de Costa de Marfil y fundó el reino de Baule).

Llegada de los europeos

Hasta el siglo XIX, el contacto europeo se limitaba a la costa, donde los comerciantes franceses y portugueses buscaban esclavos y marfil. Los franceses firmaron tratado con dirigentes de la costa en la década de 1830, lo que les permitió construir  fuertes y puestos comerciales. Francia se retiró en 1870, pero los comerciantes privados permanecieron e hicieron incursiones en el resto del país (Arthur Verdier importó de Liberia las primeras plantas de café y creó la primera plantación del país) que dieron lugar a más tratados y relaciones de «protectorado» francés con otros grupos del interior y norte del país.

A medida que se aceleraba la carrera europea por dividir África, Francia reclamó Costa de Marfil como colonia en 1893. Las fronteras se determinaron en 1898, tras la captura de Samory Touré, líder militar musulmán que fundó un poderoso reino en África Occidental y se resistió a la expansión colonial francesa a finales del siglo XIX.

El gobernador Gabriel Angoulvant inició la ocupación militar en 1908. La imposición de trabajos forzados e impuestos provocó una feroz resistencia, especialmente entre los baule, los anyi y los abe (abad). Nuevas revueltas estallaron cuando Francia reclutó a miles de marfileños para que sirvieran junto a otros soldados de África occidental en la Primera Guerra Mundial. La superioridad armamentística de Francia acabó triunfando, aunque la colonia no se consideró bajo control hasta 1918.

La independencia

Entre 1940 y 1942 la colonia, junto con el resto del África Occidental francesa, optó por permanecer bajo el gobierno de Vichy. La legislación racista, la discriminación económica contra los plantadores africanos, el aumento de los trabajos forzados y la depresión causada por el bloqueo naval británico crearon un enorme descontento.

En 1944, Félix Houphouët-Boigny y Auguste Denise formaron la Unión de Agricultores Africanos (SAA), que, con el apoyo del gobernador de la colonia, André Latrille, consiguió la igualdad de trato para los plantadores africanos. La lista de Houphouët-Boigny, totalmente africana, arrasó en las elecciones locales de 1945. Al año siguiente, con Costa de Marfil integrada en la Unión Francesa, fue elegida miembro de la Asamblea Francesa, donde impulsó la ley de abolición del trabajo forzoso en todo el imperio. Las fronteras actuales se fijaron en 1947, cuando el norte volvió a ser el país del Alto Volta.

En 1946, Houphouët-Boigny ayudó a fundar la Agrupación Democrática Africana-RDA, una organización federal con sede en África occidental que buscaba la igualdad de los africanos. La RDA y sus miembros en la Asamblea Nacional francesa se alinearon con el Partido Comunista Francés, la única oposición efectiva a los Gobiernos de la Cuarta República y única formación en la Asamblea Nacional francesa abiertamente antocolonialista. El resultado, durante los años 1948-50, fue la persecución y la  práctica supresión de la RDA en África por las Administraciones coloniales.

La rama marfileña de la RDA era el Partido Democrático de Costa de Marfil-PDCI, de tendencia más conservadora. En 1960, Houphouët-Boigny, que había sido ministro en dos Gobiernos franceses, fue elegido presidente de la nueva Costa de Marfil independiente por el PDCI. Gobernó hasta su muerte, en 1993, durante su séptimo mandato.

Post-independencia

A pesar de los intentos de golpe de estado registrados en 1963 y 1973, Houphouët-Boigny tuvo una notable capacidad para reconciliar a los oponentes, lo que mantuvo las relaciones pacíficas y prósperas del país con Francia y con sus vecinos durante la mayor parte de su mandato. Sin embargo, las tensiones internas contra el Gobierno unipartidista fueron cada vez más evidentes desde finales de la década de 1980, cuando la caída brutal de los precios de las materias primas afectó a la economía del país, gran exportador de café y cacao. Según el Banco Mundial, la población que vive por debajo del umbral de la pobreza pasa del 11% en 1985 al 31% en 1993.

Las primeras elecciones multipartidistas de Costa de Marfil se celebraron en 1990, y Houphouët-Boigny consiguió derrotar a Laurent Gbagbo, del Frente Popular Marfileño-FPI (partido de tendencia socialista, fundado en la clandestinidad) en unas elecciones presidenciales que fueron recurridas sin éxito ante el Tribunal Supremo.

A su muerte, en 1993, Houphouët-Boigny fue sucedido por el presidente de la Asamblea Nacional, Henri Konan Bédié, quien, al igual que su predecesor, era miembro de la etnia Baule y del PDCI.

Desde 1993 y hasta 1999, el país estuvo dirigido por Henry Konan Bedie, líder del PDCI, quien ganó las elecciones de 1995.

Pero partir de 1999 el país atravesó un decenio de crisis políticas, iniciado con el golpe de Estado de diciembre de ese año, a cuya cabeza se acabó colocando el general Robert Gueï (antiguo miembro del gobierno de Houphouët-Boigny ), que depuso a Henri Konan Bédié,

Aunque el golpista Gueï prometió organizar elecciones legislativas y presidenciales antes de octubre de 2000 y que no sería candidato, cambió de opinión. Tras unas controvertidas votaciones en las que el candidato perdedor, Gueï, intentó manipular el resultado, Gbagbo, del FPI, fue finalmente investido presidente, tras las protestas populares que obligaron a Gueï a apartarse.

Otro golpe militar se produjo en septiembre de 2002, que dejó dividido el país en dos zonas (norte y sur). La división hostil entre el norte musulmán y el sur cristiano se convirtió en una guerra civil en 2002, empujando a decenas de miles de inmigrantes extranjeros, refugiados liberianos y marfileños a huir a una Liberia devastada por la guerra o bien a otros países de la región, y a más de un millón de personas a desplazarse internamente.

En 2003, un alto el fuego dio lugar a que los rebeldes mantuvieran el norte, el Gobierno el sur y que las fuerzas de mantenimiento de la paz (ONUCI) ocuparan una zona intermedia.

En abril de 2004, la ONU aprobó el despliegue de una misión de mantenimiento de la paz (ONUCI).

En marzo de 2007, el presidente GBAGBO y el líder de las fuerzas rebeldes, Guillaume SORO, firmaron el Acuerdo de Ouagadougou, por el que SORO se incorporaba al gobierno de GBAGBO como primer ministro. Ambos acordaron reunificar el país, la integración de las fuerzas rebeldes en las fuerzas armadas nacionales y la celebración de elecciones presidenciales. Éstas se celebraron en noviembre de 2010.

Alassane Dramane OUATTARA ganó las elecciones de 2010 en segunda vuelta, pero GBAGBO se negó a entregar el poder; ello provocó cinco meses de conflicto violento (unas 250.000 personas buscaron refugio en Liberia y otros países vecinos y, de nuevo, cientos de miles de personas se desplazaron de sus hogares). En abril de 2011, tras un aciago combate, GBAGBO fue obligado a abandonar el cargo por los partidarios armados de OUATTARA y las fuerzas de la ONU y francesas.

Gbagbo fue detenido y trasladado a La Haya para ser juzgado ante la Corte Penal Internacional por crímenes contra la humanidad (en marzo de 2021, la Corte Penal Internacional de La Haya dictó sentencia absolutoria para GBAGBO).

El Gobierno de Ouattara contó con el apoyo de una amplia mayoría parlamentaria formada por los diputados del partido RDR (del presidente Ouattara) y del PDCI (del antiguo presidente Henri Konan Bédié). Estos dos partidos, junto a otros tres más pequeños, formaron la coalición RHDP (Rassemblement des Houphouétistes pour la Démocratie et la Paix).

En 2015, OUATTARA ganó un segundo mandato. El líder del PDCI, H.K. Bédié, no se presentó a los comicios y pidió a sus seguidores el voto para Ouattara. En segunda posición, con el 9,29% de los sufragios quedó, quedó Pascal Affi N ́Guessan, candidato de la facción del partido pro-Gbagbo (FPI) que sí acudió a las elecciones, mientras que la rama más fiel al expresidente propugnó la abstención.

El 13 de marzo de 2016 el país sufrió el primer atentado yihadista de su historia: un ataque terrorista reivindicado por AQMI causó 19 muertos y 33 heridos en la localidad costera y turística de Grand Bassam.

El 28 de abril de 2016 el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas adoptó por unanimidad la resolución 2284, que estableció el fin de la misión ONUCI el 30 de junio de 2017. Todas las actividades operacionales de los efectivos militares y de policía de ONUCI cesaron el 30 de abril de 2017.

Una nueva Constitución fue aprobada en referéndum por el pueblo marfileño el 30 de octubre de 2016, en el que según los resultados oficiales el “sí” obtuvo el 93,42% de los votos, con una tasa de participación del 42,42%. El 8 de noviembre el texto fue promulgado por el presidente, dando así comienzo a la III República. Esta nueva Constitución recoge la creación de un Senado y la instauración de la figura del Vicepresidente, y modifica las condiciones necesarias para poder ser elegido Presidente de la República (entre ellas, las que tienen que ver con la nacionalidad de los candidatos).

En las elecciones legislativas celebradas el 18 de diciembre de 2016, la coalición en el poder RHDP obtuvo una amplia mayoría con 167 escaños sobre un total de 255. El opositor FPI, de nuevo dividido entre quienes propugnaban la abstención y los que no, logró 3 escaños. 75 escaños fueron a parar a candidatos independientes, la mayor parte procedentes de las filas del PDCI y del RDR. La tasa de participación se situó en el 34,1%.

En el ámbito de la seguridad, en enero y en mayo de 2017 se registraron una serie de protestas y motines protagonizados por miembros de las Fuerzas Armadas, que reivindicaban mejores condiciones de trabajo y el pago de primas atrasadas. Además, Se registraron tensiones entre grupos dentro de las fuerzas del orden y seguridad, en la ciudad de Bouaké en enero de 2018.

En octubre de 2018 se celebraron elecciones municipales. Las elecciones transcurrieron con relativa normalidad salvo en 5 municipios, entre ellos Grand Bassam y Port Bouët, en los que fueron declaradas nulas debido a numerosas irregularidades y fueron repetidas en diciembre. Durante las elecciones resultaron muertas 5 personas en diversos incidentes.

El 11 de junio de 2020 se produjo un ataque terrorista contra un puesto del ejército y la gendarmería en la región fronteriza con Burkina Faso que causó 13 muertos.

El fallecimiento del primer ministro Gon Coulibaly en 2020, abría la incógnita de quién sería el nuevo candidato del RHDP en las elecciones presidenciales. A pesar de que la Constitución de 2016 limitaba a dos los mandatos presidenciales, el 6 de agosto de 2020 el presidente Ouattara anunció su candidatura, lo que suscitó protestas de la oposición, que llamó al boicot de las elecciones. Desde agosto, y hasta después de las elecciones del 31 de octubre, se produjeron protestas y altercados, con un saldo de 85 muertos según cifras oficiales.

En octubre de 2020, OUATTARA ganó un controvertido tercer mandato presidencial, con el 94,27% de los votos y una participación oficial del 53,9%., a pesar del límite de dos mandatos establecido en la Constitución de Costa de Marfil. La oposición no reconoció el resultado y anunció la creación de un Consejo Nacional de Transición (CNT) liderado por el expresidente Henri Konan Bédié. En noviembre, tras un encuentro entre el presidente Ouattara y el expresidente Bédié, se anunció la disolución del CNT.

En marzo de 2021, la Corte Penal Internacional de La Haya dictó sentencia absolutoria para GBAGBO, que estaba siendo juzgado por crímenes contra la humanidad (fuentes: Britannica, Ministerio de Asuntos Exteriores de España)

Costa de Marfil limita al norte con Malí y Burkina Faso, al este con Ghana, al sur con el Golfo de Guinea, al suroeste con Liberia y al noroeste con Guinea. El país es muy variado, en cuanto a que ofrece una gama diversa de paisajes; desde la sabana desértica al norte del país, hasta la selva virgen. El límite sur lo marcan 515 kilómetros de costa que se extienden a lo largo del Atlántico. Esta zona, más lluviosa, se caracteriza por las grandes plantaciones de productos de exportación tales como el café, el cacao y el plátano. En el norte, el paisaje se ve conformado por una meseta granítica recubierta de sabanas. En esta área pequeños propietarios cultivan sorgo, maíz y maní. El paisaje es, en términos generales llano, aunque se pueden encontrar relieves ondulados. Los montes más pronunciados se sitúan en el noroeste del país, donde el Monte Nimba se corona como el pico más alto, con sus 1.752 metros sobre el nivel del mar (fuente: Ministerio de Asuntos Exteriores de España)

MEDIOAMBIENTE Y CAMBIO CLIMÁTICO

Los principales problemas son la deforestación (la mayor parte de los bosques del país, antaño los más extensos de África Occidental, han sido fuertemente talados); la contaminación del agua por las aguas residuales y los efluentes industriales, mineros y agrícolas.

En las zonas costeras, el clima es tropical, mientras que en el extremo norte es semiárido. Hay tres estaciones durante el año; caluroso, con algunas lluvias desde noviembre hasta marzo; caluroso-seco, desde marzo hasta mayo; y caluroso-lluvioso, desde junio hasta octubre. En el norte se reduce a dos, la estación seca y la estación de lluvia, que se extiende de marzo a julio.