El Paìs, !2 de Julio- Al menos 64 personas han muerto este domingo, según estimaciones de la BBC, a consecuencia de dos explosiones registradas en otros tantos bares de la capital de Uganda, Kampala, que se encontraban llenos de gente que seguía la final del mundial de fútbol entre España y Holanda. "Las bombas iban dirigidas a dañar a la gente que seguía el partido", ha asegurado el inspector general de la Policía, Kale Kayihura.
Aproximadamente a la misma hora se produjeron dos explosiones. Una en el restaurante Ethiopian Village y otra en el bar de un club de rugby. Los dos establecimientos suelen frecuentarlos extranjeros. Al menos uno de los muertos es de nacionalidad estadounidense. La Policía sospecha que el atentado podría haber estado dirigido contra los occidentales establecidos en la capital ugandesa basándose en que en las últimas fechas habían recibido varias amenazas en este sentido de la guerrilla somalí Al Shabaab, ligada a la red Al Qaeda y al Ejército de Resistencia del Señor, un grupo opositor que opera en el norte de Uganda desde hace dos décadas. Por el momento, ningún grupo se ha responsabilizado del atentado.
Los heridos fueron trasladados a hospitales cercanos. La magnitud de los destrozos hace pensar que el número de muertos y heridos podría aumentar en las próximas horas. Dirigentes internacionales, como Barack Obama, han condenado ya el atentado. El presidente de los Estados Unidos ha calificado el acto de "cobarde" y "despreciable", y ha ofrecido su apoyo a Uganda.
Los dos establecimientos atacados estaban abarrotados de público congregado para ver la final del mundial entre España y Holanda. La guerrilla islamista protesta principalmente por la presencia de tropas de Uganda en Mogadisco (Somalia) como parte de una misión de la Unión Africana para proteger al frágil Gobierno interino.