Medicos Sin Fronteras, 18 de Noviembre- La Cumbre Mundial sobre la Seguridad Alimentaria ha concluido hoy en Roma sin ningún compromiso concreto para combatir la desnutrición infantil. A pesar de los 20.000 millones de dólares que el G8 prometió para apoyar la seguridad alimentaria en la reunión celebrada en L’Aquila a principios de año, en la Cumbre de Roma no se han designado fondos concretos para luchar contra la desnutrición.
Entre 3,5 y 5 millones de niños menores de 5 años mueren cada año a causa de la desnutrición. La cumbre ha sido una oportunidad perdida ya que no ha sido capaz de proteger a los más vulnerables.
En 2008, Médicos Sin Fronteras (MSF) trató a más de 300.000 niños con desnutrición en todo el mundo. A pesar de que existe un consenso científico sobre cómo prevenir la desnutrición, los equipos de MSF han sido testigos de las consecuencias de una asistencia nutricional inefectiva.
Un informe publicado por MSF la semana pasada reveló que de los miles de millones de fondos que los países de la OCDE destinan a la ayuda alimentaria internacional y la seguridad alimentaria, sólo un 1,7% se utiliza directamente para combatir la desnutrición infantil. Así pues, es necesario reasignar parte de los fondos existentes para atajar directamente el problema de la desnutrición.
Existe la necesidad urgente de un mayor número de programas destinados a las necesidades nutricionales de los niños más pequeños. Actualmente, la ayuda alimentaria de los financiadores internacionales como los países de la OCDE no contiene los nutrientes que los niños más pequeños necesitan para crecer y desarrollarse.
Los líderes del G8 no han estado presentes en la Cumbre Mundial Sobre Alimentación. Sin embargo, esto no es excusa para la inacción respecto a la desnutrición infantil, particularmente cuando se trata de asignar los fondos ya prometidos en la reunión de los G8 en L’Aquila.
www.msf.es/noticias/noticias_basicas/2009/LaCumbrenodarespuestaaladesnutricininfantil.asp