Individuos armados han matado al ministro de Justicia del estado septentrional nigeriano de Borno, Mallam-Gana Alhaji Zanna, informaron hoy fuentes de la policía local.
El comisario de policía de Borno, Yuguda Abdullahi, aseguró hoy que Alhaji Zanna murió a última hora de ayer a consecuencia de los disparos de desconocidos, quienes asaltaron la residencia familiar del alto cargo en la localidad de Bama.
Abdullahi dijo que la Policía ha iniciado una investigación, pero no aclaró si las informaciones preliminares apuntan hacia una posible autoría de los radicales islámicos de Boko Haram, aunque el objetivo, el procedimiento y el lugar del suceso hacen pensar en que sí.
A pesar de que el ministro estatal trabaja durante la semana en la capital de Borno, Maiduguri, pasa los sábados y domingos en Bama con su familia, pero una bomba obligó al Ejército nigeriano a cortar la carretera hacia la capital provincial y Alhaji Zanna tuvo que regresar a la residencia familiar.
Se trata del segundo asesinato de un alto cargo estatal en dos meses, después del de Alhaji Kadiri Kaza’a el mes pasado, entonces ministro estatal para el Medio Ambiente.
La muerte de Alhaji Zanna ha acaecido el mismo día, ayer, en el que la Fuerza de Acción Conjunta del Ejército de Nigeria anunció que había acabado con un alto cargo de Boko Haram y había arrestado a otros dos líderes durante una operación en la ciudad de Kano, en el norte.
Boko Haram, cuyo nombre significa en lenguas locales "la educación no islámica es pecado", lucha presuntamente por imponer la ley islámica en el país africano, de mayoría musulmana en el norte y preponderancia cristiana en el sur.
Desde 2009, cuando la policía nigeriana acabó con el líder de Boko Haram, Mohammed Yusuf, los radicales han llevado a cabo una sangrienta campaña que ha acabado con unas 1.400 vidas, según los datos de la organización de defensa de los derechos humanos Human Rights Watch.
Con unos 170 millones de habitantes integrados en más de 200 grupos tribales, Nigeria, el país más poblado de África, sufre múltiples tensiones por sus profundas diferencias políticas, religiosas y territoriales.
Vía | EFE