El presidente de Ghana, John Atta Mills, rechazó los comentarios del primer ministro británico, David Cameron, quie dijo que podría llegar a cancelar la ayuda a aquellos países que niegan los derechos de los homosexuales.
Mills señaló que las autoridades del Reino Unido no tenían derecho a imponer sus valores en su país y que nunca legalizaría las relaciones del mismo sexo en Ghana.
Uganda también se unió a las críticas de Mills.
El lunes, uno de los asesores presidenciales, afirmó que era un error vincular la ayuda a creencias particulares.
Los actos homosexuales son considerados ilegales en muchos países africanos porque sus autoridades dicen que violan las creencias religiosas y culturales.
Vía | BBC Mundo