Benín es el país más afectado por las fuertes lluvias que empezaron a la región de África Occidental ya el pasado mes de junio. El Gobierno del país oeste africano ya declaró el estado de emergencia.
Distinas agencias de ayuda humanitaria están ayudando a varios países de África Occidental para responder a las situaciones de emergencia causadas por las fuertes lluvias.
Un comunicado de la Oficina de Naciones Unidas para Asistencia Humanitaria, OCHA, divulgado este jueves en Dakar, en Senegal, indica que la región está siendo escenario de fuertes lluvias desde comienzos del pasado mes de junio.
El gobierno de Benín declaró el estado de emergencia en el país después de que más de 2.000 casas y escuelas hubiesen quedado sumergidas en el agua y cerca de 13.000 personas se viesen afectadas por las lluvias.
Un comité de crisis, que incluye agencias de Naciones Unidas, organizaciones no gubernamentales y representantes del gobierno de Benín, está manteniendo reuniones diarias para llevar a cabo una evaluación de la situación.
Una evaluación preliminar de la Unidad de Coordinación de Desastres de Naciones Unidas estimó que 43 de los 77 distritos de Benín se vieron afectados por la calamidad.
Cruz Roja lanzó un llamamiento la pasada semana para el abastecimiento de abrigo, comida, medicamentos, materiales escolares y de construcción para las víctimas del desastre.
El Fondo de la ONU para la Infancia, UNICEF, suministró 1.000 redes mosquiteiras y 3.000 comprimidos de clorina para el tratamiento del agua. La agencia también dispuso 100.000 dólares para financiar labores de saneamiento y una campaña de sensibilización sobre el peligro de enfermedades.
El comunicado de OCHA indica que la previsión metereológica apunta hacia la posibilidad de niveles elevados de precipitación en países como Ghana, Togo, Camerún, Gabón, Costa de Marfil, Liberia y partes de Nigeria.